México presentará a Estados Unidos un plan alternativo relacionado con China para impulsar la productividad en América del Norte y disminuir la dependencia de componentes y piezas provenientes de ese país, anunció Marcelo Ebrard, secretario de Economía.
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, y algunos legisladores estadounidenses han mostrado preocupación respecto a que China podría utilizar a México como base para evadir los aranceles de productos chinos en territorio estadounidense e invertir en el sector manufacturero mexicano.
Durante una reunión con consejeros de BBVA en Cancún, Ebrard señaló que, en diversas ocasiones, ha escuchado comentarios sobre la pérdida de competitividad de América del Norte, pero destacó que no existe un plan regional conjunto para abordar este desafío: “Cada país actúa según sus propios intereses”.
Como ejemplo, mencionó la Ley de Reducción de la Inflación de Estados Unidos (IRA, por sus siglas en inglés) de 2022, que asigna aproximadamente 380,000 millones de dólares en incentivos fiscales y apoyos para proyectos relacionados con energía limpia y cambio climático.
“Estados Unidos implementó esta ley con estímulos significativos para atraer inversión en electromovilidad, un sector donde China tiene ventaja”, comentó.
Ebrard expresó: “Hasta ahora hemos compartido algunas visiones y perspectivas, pero no hemos tenido un Plan B. México podría proponerlo. De hecho, ya estamos trabajando con muchas empresas para ponerlo en marcha”.
El secretario explicó que el objetivo es reducir las importaciones provenientes de Asia, no únicamente de China, debido al crecimiento exponencial de estas. Para ello, buscan aumentar el contenido nacional en los productos y colaborar estrechamente con las empresas exportadoras involucradas en estas cadenas de suministro.
En el Plan de Trabajo 2024-2030 de la Secretaría de Economía, se detalla que el gobierno ya colabora con las principales importadoras de Asia, como Foxconn, Intel, General Motors, DHL y Stellantis, para identificar productos que puedan ser fabricados en México.
Ebrard subrayó que México es el principal proveedor externo del mercado estadounidense y está cerca de superar a Canadá como el mayor receptor de exportaciones de Estados Unidos. Además, destacó que México alberga la mayor comunidad de estadounidenses viviendo fuera de su país.
Al concluir su intervención con los consejeros de BBVA, afirmó: “México tiene muchas ventajas y condiciones que permiten negociar favorablemente. No hay que preocuparse demasiado, pero tampoco subestimar las circunstancias”.
Un plan ya en marcha
Previamente, la presidencia de la República, a través de Claudia Sheinbaum, informó que México avanza en un plan de sustitución de importaciones provenientes de China. Según explicó, el plan busca que la producción se realice mayormente en México, ya sea con empresas nacionales o socios norteamericanos, y en menor medida con países europeos.
Rogelio Ramírez de la O, secretario de Hacienda, recordó que esta estrategia no es nueva, ya que en 2021 el expresidente Andrés Manuel López Obrador la planteó al presidente estadounidense Joe Biden en varios encuentros de alto nivel. En ese entonces, se destacó el déficit comercial con China, que supera los 80,000 millones de dólares y continúa incrementándose.
Resultados iniciales
La Secretaría de Economía ha comenzado a trabajar con empresas como General Motors, Foxconn e Intel para implementar planes de reemplazo de importaciones. Algunos avances destacados incluyen:
General Motors y Foxconn: Presentaron estrategias específicas para sustituir productos.
Intel: Planea reemplazar el 12% de sus importaciones de componentes térmicos.
Mabe: Busca trasladar más del 50% de sus importaciones al mercado nacional.
FUENTE: STAFF